Hacia el Progreso
Siguen las falsedades. En el reciente mensaje del gobernador, Alejandro García Padilla, se presentó un listado de mentiras que no guarda ninguna relación con la realidad que se vive en Puerto Rico.
Este fue uno de los peores mensajes que hemos recibido. La pregunta que tenemos que hacernos es sencilla, ¿o el gobernador no se ha dado cuenta de lo que está pasando en Puerto Rico gracias a sus erradas acciones, o sus subalternos lo engañan? El mensaje de García Padilla fue el de una persona desconectada del día a día de nuestra gente.
Diariamente recibimos quejas de alguna situación con el Programa de Educación Especial. Decir que el mismo está bien y que nada pasa es falso. Todo lo contrario. Los terapistas que brindan esenciales servicios a nuestros niños en educación especial no reciben su paga a tiempo. Inclusive, a la inmensa mayoría se les debe meses de paga atrasada.
El gobierno de García Padilla dejó de pagarle a estos profesionales en julio de 2015, lo que los obligó a acudir al tribunal para que se ordenaran los desembolsos, así que decir que todo está solucionado es mentira.
La verdad es que no hay empleados. La tasa de participación en la fuerza laboral, según datos del Negociado de Estadísticas Laborales (BLS por sus siglas en inglés) indica que la misma sigue cayendo, mes tras mes, llegando el verano pasado a ser la más baja en más de 40 años.
Sobre el tema del estatus, el gobernador, muy acomodaticiamente, trató de minimizar este asunto. Pero la realidad es que la desigualdad y la falta de oportunidades en la Isla están atadas al estatus colonial que vivimos. Nuestra gente se va a los demás estados en busca de esas oportunidades que la inmoral colonia les niega. Por eso es imperativo solucionarlo. Decir que no es importante es faltarle el respeto al pueblo que sufre esta falta de igualdad.
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