LA ÚLTIMA SESION LEGISLATIVA
La última sesión legislativa estuvo salpicada por lo que ya ha sido uso y costumbre de nuestra clase política, me refiero a la improvisación y falta de transparencia. Particularmente en el Senado de Puerto Rico vimos varios ejemplos de la premisa anterior.
En esos ejemplos vimos como los dos partidos (PNP y PPD) se convirtieron en el verdugo de la clase trabajadora magisterial y del ambiente. En término generales dejaron ver sus “garras políticas” donde le hizo daño a los que le dieron su confianza con el voto luego de escuchar aquel discurso de “habla pueblo habla”, parafraseando la consigna del senador Eduardo Bathia. Veamos.
Sobre la privatización de las playas vimos la aprobación de un proyecto bipartita (P del S 1621), que otorga “privilegios exclusivos” a dueños de casas construidas ilegalmente en la zona de La Parguera, en Lajas, municipio al sur de la isla.
Con esta acción la Legislatura estaría disponiendo de bienes de dominio público de la zona marítima terrestre, tales como playas, manglares y otros ecosistemas del litoral costero, evitando su uso y disfrute al resto de los puertorriqueños. Obviamente para beneficiar a alguien en particular se aprueba esta medida, con el voto de rojos y azules.
Pero donde se “botó la bola” fue el proyecto del plan decenal de educación. Esta medida se había aprobado en la Cámara de Representantes (P de la C 1932) con el consenso de las organizaciones sindicales del Departamento de Educación. Pues, de buenas a primeras, el canta autor del éxito “habla pueblo habla,” Eduardo Bathia, rompió ese consenso al aprobar la medida con enmiendas de forma tal que desvirtuó su esencia para abrir la puerta a la privatización y la inseguridad de empleo de la clase trabajadora en educación.
Pero eso no es todo, cuando los trabajadores de la educación se personaron al Capitolio el pasado lunes para reclamar y protestar por el atropello de Bathia, se les cerraron las puertas del ala sur del Capitolio, en momentos en que se registraron empujones con la seguridad del Capitolio y la Policía.
Los manifestantes querían dialogar con la representante Brenda López sobre el proyecto sustitutivo que presentó el senador Bhatia, y entregarle una carta con las implicaciones que tendría el proyecto en su seguridad de empleo, entre otras amenazas.
Lo interesante es que Bhatia engañó al magisterio y a los trabajadores de educación, al someter enmiendas a oscuras, a puerta cerrada y en el último día (de la sesión). Así se escribe la historia del último día de sesión en este cuatrienio. Tristemente.