Nuevamente se confirma el fracaso económico del proyecto de siembra de arroz que la administración de Alejandro García Padilla le encargó en el año 2013 al entonces secretario de Estado, David Bernier, y que ha resultado en una pérdida multimillonaria para el pueblo de Puerto Rico en medio de la crisis económica; con un arroz cuyo costo real de producción para el gobierno es de $8.20 por cada libra, lo que lo convierte en el arroz más caro del mundo y mientras las marcas más consumidas tienen un precio promedio de 42 centavos por libra. Bernier no puso reparos para endeudar al gobierno.
Este proyecto, totalmente coordinado por David Bernier, ha resultado ser una pérdida para el pueblo de Puerto Rico que, hasta ahora, podría exceder los $10 millones y mucho más si continúa administrándose de la misma manera en que lo han hecho a partir de 2013.
Este arroz, que podríamos llamar el ‘Arroz Bernier’, se ha convertido en el más caro del mundo; con una apariencia, textura y sabor muy distintos al gusto puertorriqueño por lo que su venta al detal es casi inexistente a pesar del enorme subsidio del gobierno.
Por sus raras características y su alto precio, este arroz grano largo de tipo integral tiene graves problemas para el consumo local y ni siquiera sirve para la exportación pues, subrayamos, es el arroz más caro del mundo.
En el año 2013, el entonces secretario de Estado, David Bernier, había catalogado este proyecto como un puntal de la estrategia de desarrollo económico y la creación de empleos de la administración García Padilla. El plan piloto, comenzó con 63 cuerdas de siembra de arroz en el Valle de Lajas a un costo de $1.6 millones y cuya producción sería destinada al consumo en los comedores escolares.
Buscando escalar al mercado comercial de arroz, el proyecto se extendió a un total de 439 cuerdas en sectores de Guánica y Sabana Grande con una inversión de fondos públicos que sobrepasa los $11 millones, aunque sus costos se estiman más altos.
El Departamento de Agricultura y la Autoridad de Tierras, agencias que realizan la inversión del proyecto, nunca han ofrecido datos específicos de los costos y las pérdidas, a pesar de que la prensa los ha cuestionado en varias ocasiones. En su propaganda engañosa, simplemente se dedican a decir que Puerto Rico está produciendo arroz a nivel local, pero jamás mencionan a qué costo y con cuántas pérdidas.
Mientras el gobierno incurre en millonarias pérdidas en el fracasado proyecto del ‘Arroz Bernier’, los agricultores puertorriqueños se ven afectados porque los millones de dólares dilapidados en este proyecto antes se destinaban a los programas de incentivos salariales, proyectos de infraestructura agrícola, seguros agrícolas, mercadeo de productos, protección de cultivos, fertilizantes, programas de semillas y programas como el de Unidad de Calidad y Alto Rendimiento, que fue eliminado por el Departamento de Agricultura por falta de fondos. Esta es otra muestra del fracaso de David Bernier.